Biografía y Programa de SARA ROSIQUE Y JUAN ESCALERA. Soprano y Piano


SARA ROSIQUE & JUAN ESCALERA
Soprano y piano

Recital de canciones

Música de E. Granados (1867 – 1916); C. Debussy (1862 – 1918); I. Albéniz (1860 – 1909); G. Fauré (1845 – 1924)

Sara Rosique

Natural de Sanlúcar de Barrameda, estudia canto en Sevilla con Rosa María de Alba en el CSM Manuel Castillo, licenciándose con las máximas calificaciones.
También ha recibido clases de Carlos Hacar, Ana Luisa Chova, Manuel Cid, Robert Expert, Miguel Zanetti, Mª Grazia Schiavo y Roberto Scandiuzzi.
Ha participado en numerosas producciones escénicas , entre las que se encuentran Macbeth de Verdi, Simon Boccanegra de Verdi, Madame Butterfly de Puccini, Manon de Massenet, Der ferne klang de Schrker, La sonnambula de Bellini, Fidelio de Beethoven, La rosa del azafrán de Guerrero, La verbena de la Paloma de Bretón, La tabernera del puerto de Sorozabal, Dido and Aeneas de Purcell, siendo Serpina en La serva Padrona de Pegolesi, Cupido en Venus y Adonis de Blow o la Primera dama en La flauta mágica de Mozart y la Música y la Ninfa, en L’Orfeo de Monteverdi.
Ultimamente destacan la interpretación de los papeles de “El agua” y “La aurora” en Los elementos, de Líteres, con la agrupación Le tendre amour dirigida por Esteban Màzer y bajo la dirección escénica de Adrián Schwarzstein.


Juan Escalera

Natural de Sevilla, realiza sus estudios musicales en el Conservatorio Superior de Música obteniendo el Titulo de Profesor Superior de Piano con las máximas calificaciones. Perfecciona estos estudios en países como Holanda, Francia, Suiza o Rusia, culminándolos con Josep Colom en la Universidad de Alcalá de Henares. (Madrid).
En los últimos años se ha especializado en la labor de Pianista Acompañante, función que desempeña en el C.S.M "Manuel Castillo". Asiste como repertorista en numerosos cursos a lo largo de toda la geografía española, y como pianista repetidor en varios coros de Sevilla, así como en el Teatro de la Maestranza y en la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla, siendo reconocida su labor en el XI Concurso Nacional de Interpretación Intercentros celebrado en Madrid con el premio al mejor pianista acompañante.
Esto lo compagina con un trabajo intenso en varias formaciones camerísticas, (dúos con Miguel Romero, Alfonso Rubio, Arnold Collado o Israel Fausto Martínez entre otros) y colaborando esporádicamente con artistas como Claude Delangle, Vincent David, Arno Bornakamp, el cuarteto Itálica o Rosa María de Alba


Recuerdos de la Belle Epoque

Escenas Románticas: Berceuse E. Granados 1:58

Nuit d’étoiles C. Debussy 3:03
Paysage sentimental 3:04
Zephyr 1:03
Dans le jardin 2:28
Voici que le printemps 3:09
Trois Chansons de Bilitis:
La flûte de pan 2:45
La chevelure 3:26
Le tombeau des naides 2:59

Escenas Románticas: Eva y Walter E. Granados 2:54

Rimas de Becquer I. Albéniz
Besa el aura que gime blandamente... 1:13
Del salón en el ángulo oscuro... 1:03
Me ha herido recatándose en la sombra... 1:06
Cuando sobre el pecho inclinas... 1:15
¿De dónde vengo? El más horrible y áspero... 1:20
Il en est de i’amour 3:03

Escenas Románticas: Danza de la Rosa E. Granados 3:23

Le papillon et la fleur G. Faure 2:11
Apres un reve 2:40
Au bord de l’eau 1:43
Notre amour 1:36
Les roses d’Ispahan 2:48
Clair de lune 2.4


Duración de la actuación
Una hora aproximadamente sin descanso

Sinopsis
Con este programa proponemos un viaje hasta los años dorados de la Belle Epoque, con cuatro artistas que cruzaron sus caminos en la ciudad de París de finales del siglo XIX, en una época de extraordinaria fascinación por los sentidos.
Proponemos tres grupos de canciones sirviéndonos de Granados como hilo conductor o enlace entre las mismas.
El primero será Debussy, que con su atrevido uso de la estructura armónica, la forma y el color, consigue que sus melodías sean verdaderas joyas musicales de exquisita finura y originalidad.
Seguiremos con Albéniz y sus rimas de Bequer. Algo academicistas, contrastan con la madurez de Il en est de iámour, pero nos permiten descubrir a ese otro Albéniz oculto por la sombra de Iberia.
Por último Fauré, el mayor de los cuatro. Las piezas seleccionas son la demostración más palpable de por qué muchos le consideran uno de los maestros de la música culta francesa conocida como “melodie”.